Los años noventa en California fueron marcados por un sentimiento antiinmigrante. En ese entonces, Pete Wilson—prominente partidario de deportaciones—era gobernador. Con su respaldo, los votantes aprobaron la Propuesta 187 en 1994, la cual hubiera negado educación y servicios de salud a gente indocumentada, de no haber sido declarada anticonstitucional por la Corte Suprema.
Asimismo, los votantes aprobaron la Propuesta 227 en 1998, cuya meta era eliminar los programas bilingües en las escuelas públicas y que se mantuvo en vigor hasta el año pasado cuando 73% de los votantes de California aprobaron la Propuesta 58. Esta medida derogó el requisito de “solo inglés” en las escuelas públicas establecido por la Propuesta 227.
Hoy día los programas de educación bilingüe van en aumento a lo largo del estado y las escuelas públicas están en busca de maestros capacitados para ayudar a los alumnos a desarrollar dos idiomas.